El dispositivo experimental, inventado por el físico alemán August Kundt, consiste en un tubo de acrílico transparente de sección circular, como se muestra en la Figura 1, del cual en un extremo un parlante mueve su membrana en función de la señal eléctrica que se le alimente. La membrana impulsa el desplazamiento de las vecinas moléculas del aire, dando lugar a una diferencia local de la presión respecto a la ambiente δp. Se genera así una onda de δp que se desplaza hacia el otro extremo del tubo, que de estar abierto presenta una δp = 0. Como alternativa a esta condición de extremo abierto, puede limitarse la longitud que recorre la onda L ubicando un “tapón” en el interior del tubo. El “tapón” impone un límite al desplazamiento perpendicular a su superficie de las moléculas de aire. En otras palabras, las moléculas “chocan” contra ´el, lo que produce que en su superficie se observe un máximo de δp (vientre de la onda) lo que da lugar a la llamada condición de extremo cerrado. Un micrófono puede posicionarse en cualquier posición entre parlante y el extremo, sea abierto o cerrado. Cabe destacar que el micrófono opera como un parlante en inversa, por lo que cuando su señal sea máxima, se está censando un mínimo de δp, es decir un nodo. El micrófono se conecta a un amplificador, lo que permite medir su señal con buena relación señal/ruido. Una cinta métrica pegada a la cara interna del tubo permite medir las posiciones del “tapón” y micrófono respecto al parlante.